Como comenté en anteriores artículos, recientemente recibí los Makimonos de MUSHA KOGASHIRA de la escuela Nihon Katchū Gassen no Kaï (Asociación Samurai de combate acorazado).
Como miembro de la escuela Honden Miura-Ryū Nihon-Den-Ryū Sōhei-Ha Heihō me hace replantearme un poco mi futuro. Pensé que tardaría más en llegar, pero al parecer ciertas cosas tendrán que ser aceleradas (como últimamente todo en general).
En primer lugar, toca aprender bien todo lo que podamos. En segundo lugar, lo más complicado: transmitirlo.
Este Makimono me anima a seguir adelante pero, sobre todo, a profundizar en la metodología de enseñanza que deberemos emprender a partir de ahora. Tan solo espero que haya un poco de justicia en este mundo y que se nos permita aprender y enseñar, tal y como debe ser y como debe seguir siendo.